miércoles, 23 de mayo de 2007

Nuestro Amado Ex-Líder se lo merece

Después de las declaraciones del Ex-Querido Líder sobre la guerra civil y demás mierdas varias, rescato unos fragmentos de un texto de Rodrigo García, en concreto de la obra de teatro "!Haberos quedado en casa, capullos!", en la que dedica una oda a varias personas, entre ellas el individuo del que hablamos. Espero que no se tome demasiado en serio, lo digo por los comentarios que pueda suscitar. Simplemente tomadlo con humor...


Dar palizas. Palizas. Dar palizas. Palizas con palos. Esas sí que son palizas, eh?. Bien dadas. Doy paseos. Doy palizas. Llego y doy una paliza y antes de marcharme, me despido con otra paliza. Se habla de palizas memorables cuando todavía queda algo intacto en el cerebro, cuando el receptor de la paliza no ha quedado lo suficientemente atrofiado como para no recordar absolutamente nada. El cerebro queda dañado, pero parcialmente. Y recuerda sólo para recordar aquella paliza. Cómo fué. Por dónde empezó.
Paliza es, contrariamente a lo que piensa la gente, bajar la mano. La gente llama a la paliza levantar la mano. Pero yo digo que la paliza consiste principalmente en el acto se bajar la mano.
Una paliza que se pasa de paliza, una pasada, provoca la muerte. Y la muerte exige a los familiares del apaleado o muerto un esfuerzo económico colosal. La paliza no tiene como finalidad la muerte.
La paliza es un diálogo.
No debe haber mirones. Cuando la paliza se ejecuta en público el apaleador se transforma en actor. Es malo para el apaleador, que debe estar concentrado exclusivamente en la paliza.
Sólo un presidente o un primer ministro deberían ser objeto de paliza.
Detesto profundamente la violencia, las series de televisión con catástrofes, las catástrofes aéreas, detesto la guerra, detesto todo acto violento. Confío en el diálogo por eso confío en la paliza. Estamos preparados para dialogar con José María Aznar.
La paliza nace del encuentro íntimo, del vislumbramiento del ser en sí. La paliza se justifica a sí misma en el acto. Nunca se debe apalear por motivos morales. Nunca apalear por motivos personales, porque toda razón personal es razón social y lo social es una constante distorsión de lo espiritual.
No se le escoge por hacer el bien.
Es el elegido y mejor no hacer preguntas. Tenemos la teoría. Tenemos la energía. Tenemos un lugar. Primero la energía, luego dejarse llevar. La acción es cadencia. En la vitalidad del apaleamiento tú y yo bajamos al infierno por así decirlo.

Noche de rayos y truenos.

La que está cayendo por aquí...desde el sofá puedo ver cómo la noche se convierte en día por unos segundos a base de relámpagos. Buen momento para quedarse amodorrados en casita viendo una película o haciendo lo que cada uno pueda. Pensativo me quedé escuchando el run run de la lluvia cuando me vino a la cabeza esta canción basada en el poema de Poe del mismo título, posiblemente mi canción preferida del pop español. El video, como todos los de Radio Futura, no le hace honor a la tonada, es hortera y kitch a dolor,pero es lo que hay. A todo ésto, Poe escribió este triste asunto tras la muerte de su joven esposa, que por cierto le faltaban varios herbores, lo que hizo que la tratase siempre como una niña...



Hace muchos muchos años en un reino junto al mar
habitó una señorita cuyo nombre era Annabel Lee
y crecía aquella flor sin pensar en nada más
que en amar y ser amada, ser amada por mi.

Éramos sólo dos niños mas tan grande nuestro amor
que los ángeles del cielo nos cogieron envidia
pues no eran tan felices, ni siquiera la mitad
como todo el mundo sabe, en aquel reino junto al mar.

Por eso un viento partió de una oscura nube aquella noche
para helar el corazón de la hermosa Annabel Lee
luego vino a llevarsela su noble parentela
para enterrarla en un sepulcro en aquel reino junto al mar.

No luce la luna sin traermela en sueños
ni brilla una estrella sin que vea sus ojos
y así paso la noche acostado con ella
mi querida hermosa, mi vida, mi esposa.

Nuestro amor era más fuerte que el amor de los mayores
que saben más como dicen de las cosas de la vida
ni los ángeles del cielo ni los demonios del mar
separarán jamas mi alma del alma de Annabel Lee.

No luce la luna sin traermela en sueños
ni brilla una estrella sin que vea sus ojos
y así paso la noche acostado con ella
mi querida hermosa, mi vida, mi esposa.

En aquel sepulcro junto al mar
en su tumba junto al mar ruidoso.

lunes, 21 de mayo de 2007

Los 300 votos de Democracia Ourensana

Impresionante video electoral el que se han currado los freaks de D.O. (Democracia Ourensana), partido ultraminoritario cuya sede es una cafetería muy concurrida por un servidor, cuya fauna daría para un largo comentario que sin duda algún día me animaré a escribir. El video no tiene desperdicio, mirad y asombraos...

Noticias del Mundo


Ah, qué recuerdos, posiblemente el mejor periódico de humor jamás publicado (a excepción de El Mundo y su columna de Federico J. Losantos,claro). Qué tardes partiéndonos el ojete con los descubrimientos de esta suerte de National Geographic casposo y paranormal, increíbles fenómenos se desplegaban ante nuestros ojos relatados de una manera que rayaba lo esquizoide. Recuerdo la consternación que nos asaltó cuando descubrimos !la verdadera calavera de Satanás! ¡El hombre con el hacha clavada en la cabeza que hacía una vida perfectamente normal! !La mujer con la lengua de 22 cm.!. Oig, amiguetes, qué maravilla de publicación, que hartura de imaginación. Después me acuerdo que en el Jueves intentaron hacer una copia de este summum del periodismo de investigación, pero no le llegaba a la suela de los zapatos. Con 75 pts. tenías para reirte toda la tarde...El caso es que en ningún sitio ponía que no fuese verdad lo que allí relataban...siempre me picó la curiosidad de si alguna persona podía creerlo. Bueno, yo algunas cosas si me las creo, aún hoy en día. Lo del niño murciélago, por ejemplo, o lo del niño con cara de mayor (de aquellas no había photoshop, estaba claro). Una última cosa. Mirad lo de la baba de caracol que es muy buena para la piel...de aquellas nadie se imaginaba el bombardeo contínuo que en las teles locales iba a protagonizar la exclusiva crema facial de extracto de caracol. La realidad siempre supera a la ficción, está claro.
¿Qué será de él hoy en día?...Esta pregunta me atormenta

Clásico popular. ¿Por qué habrá desaparecido esta maravilla?

En este enlace podeis disfrutar de un montón de páginas de tan entrañable publicación. !Risas, risas mil!
http://www.flickr.com/photos/papelcontinuo/sets/72157600180186373/

sábado, 19 de mayo de 2007

Un poema para mi sobrino


Si vas a emprender el viaje hacia Ítaca,
pide que tu camino sea largo,
rico en experiencias, en conocimiento.
A Lestrigones y a Cíclopes,
o al airado Poseidón nunca temas,
no hallarás tales seres en tu ruta
si alto es tu pensamiento y limpia
la emoción de tu espítitu y tu cuerpo.
A Lestrigones y a Cíclopes,
ni al fiero Poseidón hallarás nunca,
si no los llevas dentro de tu alma,
si no es tu alma quien ante ti los pone.

Pide que tu camino sea largo.
Que numerosas sean las mañanas de verano
en que con placer, felizmente
arribes a bahías nunca vistas;
detente en los emporios de Fenicia
y adquiere hermosas mercancías,
madreperla y coral, y ámbar y ébano,
perfumes deliciosos y diversos,
cuanto puedas invierte en voluptuosos y delicados perfumes;
visita muchas ciudades de Egipto
y con avidez aprende de los sabios.

Ten siempre a Ítaca en la memoria.
Llegar allí es tu meta.
Mas no apresures el viaje.
Mejor que se extienda largos años;
y en tu vejez arribes a la isla
con cuanto hayas ganado en el camino,
sin esperar que Ítaca te enriquezca.

Ítaca te regaló un hermoso viaje.
Sin ella el camino no hubieras emprendido.
Mas ninguna otra cosa puede darte.

Aunque pobre la encuentres, no te engañará Ítaca.
Rico en saber y en vida, como has vuelto,
comprendes ya qué significan las Ítacas.

Kavafis.

Zodiac, de David Fincher


Hoy, al tomarme un café en el bar de al lado de mi casa, me encontré con la crítica del País en la que definían a la nueva película de Fincher como "obra maestra". Había oído noticias de que el hombre éste estaba rodando una nueva película sobre un asesino en serie, en este caso el célebre "Asesino del Zodiaco", lo que no sabía es que la estrenaban tan pronto. Teniendo en cuenta la que montó con "Seven", película plagiada en casi todos los thrillers oscurillos que se han hecho desde su estreno, tenía que verla.
Allí estábamos The Brave Sir Robin y un servidor, con nuestras sendas bolsas de palomitas tamaño pequeño -más que nada porque no habíamos cenado, y se nos planteaban tres horas por delante-, dispuestos a asombrarnos y maravillarnos con la magia del cine...Dios...Qué tostón, que aburrimiento supino, que manera de adormecer al personal...En mi vida me había pasado lo que con esta película,!Me dormí en el cine!. Después de dos horas de intensa investigación policial, intentando atrapar a un asesino que no podía ser más soso, caí en un profundo sopor del que no me recuperé hasta casi el final. Abría los ojos de vez en cuando, y más o menos podía seguir el hilo, más que nada porque la acción no avanza en absoluto, a los veinte minutos comienzan a buscar al jodido Zodiac de los huevos, y dos horas después...lo siguen buscando. Hay quien dirá que es una nueva forma de narrativa fílmica, una revolución dramatúrgica del copón bendito y blablabla. Es ABURRIDA, simple y llanamente, el director consiguió que me diese igual que el hortera asesino que lleva como nombre "Zodiaco" matase a un montón de niños, a un taxista, a una monja o al propio Karol Woitila. Es que me la suda. Me da igual, no me interesa. Lo único a destacar son las presencias de Robert Downey Jr., en un papel de borrachuzas que le va que ni pintado, y de Jake Gyllenhaal, que desde Donnie Darko ya me da igual lo que haga, porque si lo hace bien, pues bien, y si lo hace mal, siempre me puedo imaginar que estoy viendo al chaval del conejo esquizo. Una lástima, qué seis euros más mal gastados.

viernes, 18 de mayo de 2007

Black Hole Sun

Ayer en el coche escuché esta canción y me acordé de un amigo al que le gustaba mucho, aunque creo que ahora no le dirá nada...El asunto ocurrió en la primavera de hace ya dos años...Un recuerdo para él, esté como esté y piense lo que piense.



In my eyes
Indisposed
In disguise
As no one knows
Hides the face
Lies the snake
The sun
In my disgrace
Boiling heat
Summer stench
neath the black
The sky looks dead
Call my name
Through the cream
And Ill hear you
Scream again

Black hole sun
Wont you come
And wash away the rain
Black hole sun
Wont you come
Wont you come

Stuttering
Cold and damp
Steal the warm wind
Tired friend
Times are gone
For honest men
And sometimes
Far too long
For snakes
In my shoes
A walking sleep
And my youth
I pray to keep
Heaven send
Hell away
No one sings
Like you
Anymore

Hang my head
Drown my fear
Till you all just
Disappear

martes, 15 de mayo de 2007

Una tarde apocalyptica

Hoy me pasado la tarde haciendo lo que ahora se viene llamando el "espacio sonoro" de una obra de teatro, o sea, lo que antes era "escoger la música" sin más. Me pregunto qué clase de espacio es el sonoro...quizá una cuarta dimensión a lo Iker?. Cosas del lenguaje y del snobismo de cada uno que allá cada cual verá lo que ha de hacer con su vida que yo bastante tengo con la mía (respiro). En fin, que he estado unas tres horas escuchando un porrón de discos que de un tiempo a esta parte tengo organizaditos con el iTunes (no os preocupeis, sigo odiando el Mac y a Steve Jobs, o Jobbs, o cómo se diga). El caso es que ahora que quería escribir aquí para desahogarme un poquillo, tengo la cabeza tan llena de notas, ritmos, riffs, tarareos y demás que lo único que puedo es hablar del grupo que más provecho me ha dado: Apocalyptica, una banda de algo que se le ha llamado "Cello Rock" (supongo que por ponerle una etiqueta-pegada con celo- (risas, risas)), afincada en Helsinki y que llevan en ésto desde el 1992, aunque el nombre se lo pusieron en 1996, cuando grabaron el disco que les dió más pasta, el "Playing Metallica with four cellos", muy bueno todo él, aunque le falte el "Nothing Else Matters", que aparece en el siguiente, "Inquisition Symphony". Os dejo unos videos, no es que sean una maravilla...pero bueno, al menos los escucháis. Aunque supongo que los conoceréis de sobra.

lunes, 14 de mayo de 2007

Las batallas perdidas...

Con música estridente vengo, con mis cornetas y tambores,
No sólo ejecuto marchas para las seguras victorias,
ejecuto marchas para los vencidos y los muertos.

¿Has oído que está bien ganar la batalla?
Yo afirmo que perderla está bien, las batallas se
pierden con el mismo coraje con que se ganan...

Yo doblo y redoblo para los muertos,
Suenan mis clarines por ellos con el regocijo mayor
de que soy capaz.
¡Vivas a los vencidos,
Y a aquellos cuyas naves de guerra se hundieron en el mar,
Y a aquellos que se hundieron en el mar,
Y a todos los generales que han sido derrotados, y a
todos los héroes vencidos,
Y a los innumerables héroes desconocidos, iguales a
los más famosos!

W.W.

Muros

Casi todos los pueblillos de la costa se parecen, éso está claro. Todos tienen su paseo junto al mar, sus marisquerías, sus pulperías, su discoteca a las afueras, sus tiendas de artículos marineros ultrakitch (con campanas de latón, cuadros con miles de nudos de extraños nombres, figuritas de gordos marineros a lo chanquete...), y su paisanaje más o menos curioso. Muros se acerca bastante al arquetipo ideal, tiene todos esos elementos, pero también tiene algo que lo hace un poco especial, no sé muy bien lo qué, pero lo tiene. Quizá sea que conserva perfectamente el trazado medieval de las callejuelas, las tremendas playas que lo rodean, o su iglesia marinera, San Pedro de Muros, en la que está el cristo más gore que vi en mi vida. Qué ganas de tener unas vacaciones y hartarme de playa. Porque me voy a hartar, éso seguro. Este año toca...

Vista de Muros desde la pedazo terraza del hotel

El mar mañanero desde la misma terraza...

En la plaza que da al mar, el antiguo "Teatro Mercedes", que ha sido convertido en bar de copas.

Momento bizarro. Este cartel estaba pegado en la puerta del teatro. Desafortunadísima imagen, en lo que parece ser un crimen anunciado...La cara del sujeto no tiene desperdicio, un trasunto hispano del tétrico Zé do Caixao...Loly, huye, aún estás a tiempo!.

"Long hard road out of Hell"...Manson estaría encantado en Muros.

jueves, 10 de mayo de 2007

Fucking day!!!!

Trabajo y más trabajo, ganas de tener unas vacaciones urgentes, un calor del copón bendito y las propias cosas de uno mismo han hecho que este día fuese laaaaargo como un mundo e neghro como a cona que te pariu, como dicen por aquí. Los únicos momentos de asueto y desconecte han sido los viajes en coche de aquí para allá, de la ceca a la meca y de pitos a flautas, escuchando un disco recopilatorio de ésos que florecen en mi coche como setas en otoño. Miras debajo de unas hojas que llevan ahí siglos, y aparece un recopilatorio. Abres la guantera, un recopilatorio. En la bandejita de la puerta...¡coño!, un recopilatorio. Cosas de la vida y de la mula. Pues el caso es que yendo a cenar a casa de unos amigos, salió por los altavoces la celebérrima sintonía de esta bonita tonadilla, inmortalizada allá por los noventa del pasado siglo por un tal Axl Rose, de aquellas una bestia del rock, y ahora una bestia, simplemente. Cosas del "cambio radical" y el votox que encharca las facciones de este joselito norteamericano. El caso es que no resistí la tentación. Sin dejarme llevar por el pudor de tener las ventanillas bajadas, y teniendo en cuenta que iba por una carretera, no por zona urbana, subí el volumen hasta límites sangrantes y empecé con mis gallitos tomateros...oh, qué momentazo, lástima el tener que parar de hacer la air guitar cuando entraba en las curvas...qué relax para el cuerpo y el alma...qué gusto.


Y, evidentemente, como una cosa lleva a la otra y ya no hay leyenda que se respete, el momentazo chanante que ya es parte indisoluble de la canción.


Y la letra para que hagais vuestros propios gallitos...

She's got a smile that it seems to me
Reminds me of childhood memories
Where everything
Was as fresh as the bright blue sky
Now and then when I see her face
She takes me away to that special place
And if I'd stare too long
I'd probably break down and cry

Sweet child o' mine
Sweet love of mine

She's got eyes of the bluest skies
As if they thought of rain
I hate to look into those eyes
And see an ounce of pain
Her hair reminds me of a warm safe place
Where as a child I'd hide
And pray for the thunder
And the rain
To quietly pass me by

Sweet child o' mine
Sweet love of mine

Where do we go
Where do we go now
Where do we go
Sweet child o' mine
No es su máscara del museo de cera. Es él. El horror, el horror....

martes, 8 de mayo de 2007

Los charlatanes, de Bukowski



Éste poema me hizo recordar cierta cena en Ferrol, seguro que Jose se acuerda...del elemento.

el muchacho me cruza el alma con
pies enfangados
habla de recitales, virtuosos, directores de orquesta,
las novelas menos conocidas de Dostoievski;
habla de cómo corrigió a una camarera,
una mozas que no tenía idea de que la vinagreta
se compone de tal y cual;
parlotea sobre el Arte hasta que me hace
aborrecer el Arte,
y no hay nada más cabal
que regresar a un bar o al
hipódromo y verlos correr,
ver pasar las cosas sin tanto
clamoreo y cháchara,
charla, charla, charla,
la boquita que no para, los ojos venga a parpadear,
un muchacho, un crío, enfermo de tanto Arte,
aferrado a él como al delantal de una madre,
y me pregunto cuántas decenas de miles
como él hay en toda la tierra
en noches de lluvia
en mañanas soleadas
en tardes que deberían ser de paz
en auditorios
en cafés
en recitales de poesía venga
hablar , ensuciar, discutir.
es como cuando un cerdo se acuesta
con una buena mujer
y tú dejas
de desearla.

"La diligencia", de John Ford


Hoy a la hora de la siesta, en vez de tirarme en el sofá a ver concursos culturales de ésos sin público o documentales sobre ñúes, cebras y los leones que se las zampan, decidí continuar con el ciclo del por mí denostado hasta el otro día "cine de vaqueros", como decíamos de pequeños, antes de que se nos introdujera en las mentes el término "western". Estaba entre dos de Peckinpah ("Pat Garret y Billy the Kid" y "Grupo Salvaje"), y otra de John Ford, ("Centauros del desierto"). La duración excesiva de todas ellas me hizo inclinarme por "La diligencia", título seminal que supuso la renovación del cine del oeste, en plena decadencia y tenido por algo caduco y antiguo ya en el 1939, año en el que se produjo esta película.
El argumento es digno de la primera partida de rol que te echas con los amiguetes cuando te compras con catorce años el Ad&d. Un grupo de personajes metidos en una diligencia tienen que llegar un pueblo. Por el camino los atacan los indios. En el momento en el que están a punto de caer en manos de esos malvadísimos rebeldes terroristas que odian la democracia, aparece el séptimo de caballería y los salva. Los dos personajes más majetes resuelven sus conflictos respectivos que les impedían tener una vida normal, y se van a vivir a un rancho. Fin de la historia. Ahora me pregunto...¿cómo con un argumento así se puede hacer una película asá?
Yo creo que el secreto está en los personajes que habitan el reducido espacio de la diligencia, un muestrario de arquetipos del oeste en el que no faltan los siguientes:

El médico borracho, un outsider bohemio que tan bien recita a Homero como ayuda a la mujer decente a parir su bebecillo en plena posada mexicana. Interpretado por un Thomas Mitchell que ganó el Oscar al mejor actor de reparto por este papelón.




El jugador de cartas enjuto y con bigotín, un tío pendenciero pero que se ve en el fondo que es un caballero, un tipo sensible que sabe decir "he visto un ángel", en vez de "vaya tía más cachonda", cuando ve a la mujer decente pasar. John Carradine, en la foto, con unos colegas, viendo "el ángel".




El viajante que comercia con cajas de whisky, enanete y con pinta de contable. De hecho, os juro que es igual que el cajero de la sucursal de CaixaNova que tengo al lado de casa. De verdad. Como es un tipo bastante gracioso, le pegan el primer flechazo. Aquí podemos ver tan infausto momento.




La mujer decente que va a buscar a su marido,un sargento del ejército que bla bla bla. Su peripecia es bastante sosa y aburrida, como la de cualquier mujer decente. En este momento está a puntito de pasar a mejor vida.





Dallas, la pobre chica que tiene que salir del pueblo perseguida por las horripilantes mujeres de la liga por el orden y la justicia, ya que ejerce el oficio de prespiputa. Junto con Ringo, el pesonaje más atractivo de la película, sufre en silencio la carga de su pecado pero se ve que en el fondo lo que se ve es que nunca tuvo un hombre que la quisiera de verdad (vaya, no me equivocaba al pensar que esto del western era un asunto bastante ranciete, al fin y al cabo).


Y por último, el crack del asunto, Ringo, un John Wayne haciendo de John Wayne, como en la de Liberty Valance, pero como más joven e inexperto, aunque éso sí, con ganas de mojar el churrillo y más caliente que una mona al ver a la chica no decente, algo normal ya que nos enteramos que entró a la cárcel con 17 añicos y acaba de fugarse, suponemos que no ha probado mujer en todos estos años. El caso es que resulta un tipo muy progresista para su tiempo, ya que no le importa conocer el oscuro y sórdido pasado de Dallas, todo le da igual con tal de llevársela a su rancho. El chico anda apurado, es evidente. Suponemos que en el futuro se casarán, tendrán miles de hijos y poblarán de votantes republicanos esas desérticas tierras sureñas.
Lo que me llamó poderosamente la atención fué que la persecución india está perfectamente rodada, pero pasados los dos primeros minutos los indios ya se ve que son malísimos tirando, y que están allí puestos como una manada de búfalos, siendo simples bultos móviles para el gran tirador blanco. Éso la verdad es que me sorprendió bastante, haciéndome por un momento recordar a los peores momentos del guerrero americano I, II y III,en los que mucho ninja,jijijajá, pero al final unos mierdas que no tenían media hostia. Ahí queda éso como reflexión final. Pero que conste que me ha gustado mucho. Seguiré con el ciclo.

domingo, 6 de mayo de 2007

sábado, 5 de mayo de 2007

"As últimas lúas", de Furio Bordon, por Lagarta Lagarta


Hoy, a pesar del cansancio congénito que poseía todo mi ser, me acerqué al Principal para ver esta obra, atraído por una buena crítica que había leído ya hace tiempo en un periódico. El público del teatro era en general de una edad más que avanzada, lo que me sorprendió después de ver la cantidad de jóvenes que asistían a la MITEU estos días pasados...por otra parte, yo no sé si soy cada vez más tiquismiquis, pero es que el comienzo de las obras, ese momento de cierta magia en la que comienzas a entrar en la atmósfera del asunto, es destruido siempre por la legión de fotógrafos que asisten únicamente a los dos primeros minutos, llenan ese silencio ritual con cientos de sus cliclís y se van, en ocasiones con no demasiada sutileza...qué coñazo. Aparte de ese detalle, hoy había entre los vejetes varios con una propensión desmedida a tomar caramelos de eucalipto, supongo que por abrir vías respiratorias y demás. Lo malo es que no abren el caramelo de un golpe, y se lo meten en sus fauces. No. Lo abren poco a poco, como intentando disimular, con lo que el sxxcccrrrrcssrsrxcrcr resultante se prolonga agónicamente durante al menos un par de minutos, dependiendo del grado de destreza del sujeto en cuestión. Pero bueno, el caso es que he venido aquí a hablar de la obra.
El texto es la principal baza del espectáculo, una pequeña joya sobre el papel que tienen los ancianos en la sociedad, una vez que se convierten en éso que se le ha venido llamando tercera edad, que es algo así como el Tercer Mundo, pero en plan cronológico en vez de espacial. Ernesto Chao encarna a un viejo profesor de literatura en el último día que pasa en su casa antes de dirigirse al asilo, al cementerio de elefantes. Rosa Álvarez es su esposa, que ha muerto con cuarenta y pico años pero que ese día conversa con él. O más bien, él conversa con su fantasma...muy bonito el hecho de que él la siga recordando como era, como una mujer tiernísima, intercambiando impresiones en lo que, para mí, es el mejor momento de la obra, el principio. Aunque después no desmerezca en absoluto. El humor aparece sobre todo en cuanto entra su hijo, personaje harto desagradable muy bien interpretado por Artur Trillo, en una situación que el autor muy sabiamente trata de una manera cómica, sobre todo por los puteos que el padre dedica al hijo en ese momento tan difícil. El segundo acto se convierte en un monólogo que Ernesto dirige a una planta, su única confidente en el asilo en el que está confinado. Muy dura esa parte, muy difícil y muy arriesgada, con Ernesto como nunca lo había visto encima de un escenario (tampoco es que lo haya visto muchas veces) aunque a veces yo desconecté un poco, creo que a causa sobre todo de la relativamente parada propuesta de dirección, o quizás por el cansancio acumulado...
En fin, una muy buena elección de texto (que había interpretado Mastroianni en su último trabajo en teatro), y una propuesta que me parece arriesgada pero con unos resultados de calidad muy altos. Merece la pena.

jueves, 3 de mayo de 2007

"Si consideramos", de Bukowski.

si consideramos lo que puede verse:
motores que nos vuelven locos,
amantes que acaban odiándose,
ese pescado que en el mercado
mira fijamente hacia atrás adentrándose en nuestras
mentes,
flores podridas, moscas atrapadas en telarañas,
motines, rugidos de leones enjaulados,
payasos enamorados de billetes,
naciones que trasladan a la gente como peones de
ajedrez,
ladrones a la luz del día con maravillosas
esposas y vinos por la noche,
las cárceles atestadas,
el tópico de los parados,
hierba moribunda, fuegos insignificantes,
hombres suficientemente viejos como para amar la
tumba.

Estas y otras cosas
demuestran que la vida gira sobre un eje podrido.

Pero nos han dejado un poco de música
y un póster clavado en el rincón
un vaso de whisky, una corbata azul
un delgado volumen de poemas de Rimbaud,
un caballo que corre como si el diablo le estuviera
retorciendo la cola
sobre la hierba azul y el griterío
y después, de nuevo, el amor
como un coche que dobla la esquina
puntual,
la ciudad a la espera
el vino y las flores
el agua corriendo a través del lago
y verano e invierno y verano y verano
y de nuevo invierno.

miércoles, 2 de mayo de 2007

Ánimo Lula!


Desde aquí mil caricias a Lula, que la pobre anda bastante escangallada. Todo el mundo mandando buenas vibraciones para que se mejore, que la perra se lo merece, caramba. El vídeo es de cuando era cachorrilla y nadie podía imaginar que se convirtiese en un monstruo de destrucción.Un beso muy grande para Neit&Loulei.

!Tengo cámara!

Por fin, después de mucho buscar, hoy por fin he encontrado la cámara que quería (Panasonic Lumix DMC-FX12, con lente Leica), es decir, el modelo nuevo de la que tenía, que pereció después de una tarde de sol de infarto en el Algarve este verano. Esperemos que ésta me dure más. Por si acaso he guardado la garantía bajo llave, para no perderla, como me pasó con la otra...
Cuelgo la primera foto que saqué con ella, a ciertas flores regaladas que no supieron sobrevivir a las inclemencias de esta casa ni a la ferocidad de los gatos, cansados ya de comer plantas de plástico...

Soy un negado con las lentillas


La semana pasada, al ver lo caras que me salían unas gafas de sol graduadas, tomé la decisión de la semana: me pondría lentillas, y así, podría lucir las gafas de sol que me diese la real gana, incluidas las de Zara y las de los negros de las verbenas (esas con granitos de arroz plateados en la montura, extreme bizarre). Pues bien, el lunes fuí, una chica muy agradable me las puso, y acto seguido los ojos se me pusieron como tomates cherry, rojos, parecían banderas portuguesas. El caso es que se me fué pasando la molestia, estuve una hora dando vueltas por la ciudad como un pasmarote, volví, y un muchachote me las arrancó de un certero pellizco digno del maestro Miyagui. Todo perfecto.
Pero no. Nada más lejos de la perfección. Hoy me pasé por allí para aprender a ponérmelas....desastre total. Mientras estuvo a mi lado la chica, logré ponerme la derecha, pero no me la dí sacado, y lo peor es que ella me dejó en la habitación (con cientos de espejos), sólo, con un cacho de plástico pegado al ojo, diciéndome: "tú pellizca, ya verás cómo sale". Pellizcarme el ojo. Junto con la idea de meterme una aguja de ganchillo por cierta parte, creo que pocas cosas me dan tanta grima...pero allí estaba yo, todo afanado en intentar sacarme aquel cuerpo extraño. Lo conseguí, pero me quedó el ojo lloroso, tenblequeando y con ganas de venganza. Me puse a darle caña al otro, y no logré ni ponérmela, media hora, y allí no aparecía nadie. Probé otra vez con el derecho, imposible, el ojo seguía enfurecido conmigo y no se dejaba doblegar....desesperado por mi inpericia, decidí salir de allí como pude, intentando ver algo a través de las dos canicas sanguinolentas en las que se habían convertido mis ojos...volveré a la tarde, a ver si con suerte...

"Anciano", de Kavafis



En el interior de un ruidoso café
un anciano se apoya sobre un velador;
un periódico ante él, iluminado por la soledad.

Y en el desprecio de su miserable vejez
piensa qué poco gozó de los años
cuando tuvo vigor, y elocuencia, y belleza.

Ha envejecido tanto; lo siente, lo ve.
El tiempo de su juventud, como si hubiera sido ayer,
pasó. Qué velozmente, qué velozmente.

Medita en cómo ahora se ríe de él la Sabiduría;
y cómo fió siempre -¡qué locura!-
de esa embustera que le decía: "Mañana. Tienes mucho tiempo".

Recuerda impulsos que contuvo; y el sacrificio
de su felicidad. De su insensata prudencia
se burla hoy cada ocasión perdida.

...Hasta que de tanto evocar el pasado
se adormece. Hundido
sobre el velador solitario.

martes, 1 de mayo de 2007

"El hombre que mató a Liberty Valance",de John Ford



-"¿Acaso considera usted que para representar a este territorio es un mérito haber matado a un hombre?"
-¿Desde cuándo es matar a un hombre matar a Liberty Valance?"

El último western que recuerdo haber visto en mi vida es "Sin perdón", de Clint Eastwood, en el momento en el que salió en video, supongo que hace ya más de diez años. Bastante más. Es un género que nunca me atrajo demasiado, me parece aburrido, soso, y bastante rancio. Supongo que estos prejuicios, como todos, surgen del desconocimiento, y esta película lo corrobora. El oeste se convierte en manos de Ford en un territorio casi mitológico, un mundo al que los avances tecnológicos y sociales no le auguran una larga vida, un paisaje crepuscular en el cual los hombres han de aprender a vivir según unas nuevas normas, las de la ley, dejando atrás los años en los que la primacía del más rápido era el único argumento válido. La llegada del recién licenciado en derecho Ransom Stoddard, interpretado por un James Stewart impresionante, va a suponer un huracán de aire fresco en el pueblo de Shinbone, asolado por la tiranía del malo malísimo, Liberty Valance (Lee Marvin con atuendo de mariachi). Impresionante está John Wayne, haciendo de John Wayne, pero en plan sentimental, el momento en el que quema su casa y con ella sus ansias de casarse con la muchacha de la película (sólo hay una, es una peli de hombretones), me hizo ver que este arquetipo de republicano puede también tener su corazoncito. Lo mejor de la película, para mi, es lo irónico del asunto. El senador conseguirá su puesto, principalmente, no por el uso que hace de las leyes, sino por haber matado a Valance, algo que le supondrá un cargo de conciencia durante toda su vida. Una gran historia, ambientada en el oeste pero que se podría trasladar a cualquier época decadente. Imaginémonos por un momento hace unos siete años. Los salones recreativos están de capa caída, las consolas cada vez son más potentes y ya nadie quiere gastar 25 pts. en jugar al Pang. El matón que apesta a ducados y tiene pinta de haber probado ya la heroína no para de pedir dinerillo a los chapones frikis que van a jugar al Golden Axe. Hasta que un dia, uno de esos petrimetres cuatro ojos tiene un momento de rabia y en un alarde de dignidad, no le importaba morir con tal de tener una oportunidad de matar al chulo del barrio (porque eso es lo que es Valance, un matón de sala de máquinas, básicamente), consiguiendo su objetivo con la considerable ayuda de John Wayne (que era como de otra época, y jugaba al futbolín sólo) que para eso está, para eso y para darle al pitillo.
Dame cinco duros o te parto la cabeza

Seguimos con Chinaski

La bestia

mi bestia llega por la tarde
me muerde las entrañas
me acaricia la cabeza
gruñe
escupe parte de mí.

mi bestia llega por la tarde
mientras otros hacen fotos
mientras otros van de merienda
mi bestia llega por la tarde
a través del sucio suelo de la cocina
con mirada lasciva.

mientras otros tienen empleos
que les impiden pensar
mi bestia me permite pensar
en ella,
en cementerios de locura y miedo
y en flores rancias y decadencia
y en el hedor del brío apagado.

mi bestia no me deja en paz
llega por las tardes
me muerde y me araña
y le digo
doblado de dolor, cogiéndome el vientre con las manos,
joder, ¿cómo les voy a a explicar tu presencia a
ellos? creen que soy un cobarde
pero los cobardes son ellos porque se niegan a
sentir, su valor es el de los
caracoles.
mi bestia no está interesada en mi desdichada
teoría: rasga, mastica, escupe
otro trozo de
mí.

salgo por la puerta y me sigue
calle abajo.
nos cruzamos con las hermosas colegialas risueñas
las camionetas de la panadería
y el sol se abre y se cierra como una ostra
engullendo a mi bestia un instante
mientras cruzo un semáforo en verde
con la pretensión de haber escapado,
con la pretensión de que necesito una barra de pan o
un periódico,
con la pretensión de que la bestia se ha ido de una vez por todas
y de que las partes de mí desgajadas
siguen ahí
bajo una camiseta azul y unos pantalones verdes
a medida que todas las caras se tornan muros
y todos los muros se tornan imposibles.

El dia del trabajo



Para conmemorarlo, una poesía de Bukowski, de su libro "Blue beads and bones" (Cuentas de vidrio azules y huesos"), en la que expone claramente su postura sobre esta obligada función del ser humano.

Mi padre y el holgazán
mi padre creía en el trabajo.
se enorgullecía de tener un
empleo.
a veces no tenía
trabajo y estaba muy
avergonzado.
estaba tan avergonzado que
salía de casa por la mañana
y luego regresaba por la tarde
para que los vecinos no se
enteraran.

a mí,
me caía bien el vecino de al lado:
se repantingaba en un sillón en
el jardín de atrás ylanzaba dardos
contra unos círculos que había pintado
en la pared del garaje.
en Los Ángeles en 1930
era dueño de una sabiduría que a
Goethe, Hegel, Kierkegaard,
Nietzsche, Freud,
Jaspers, Heidegger y
Toynbee les resultaría difícil
desmentir.