lunes, 30 de julio de 2007

Festival de Teatro Clásico de Almagro. 1ª Parte.


Pues allí estaba un servidor, en plena sartén manchega,dispuesto a disfrutar de unos días del mejor teatro clásico que se puede encontrar por estas -esas, más bien-, latitudes. En primer lugar, recalcar que Almagro es una ciudad prácticamente impracticable la mayor parte del día, con habitantes de tipo vago estilo gaditano, que abren sus tiendas a las 18:00, hora en la cual digamos que se comienza a poder salir del agujero en el que cada uno viva. Pues bien, pasaré a continuación a señalar lo que pude ver en esos días.El primer espectáculo que pude disfrutar fue "Del rey abajo, ninguno", de Rojas Zorrilla, puesto en escena por la Compañía Nacional de Teatro Clásico, con dirección de Laila Ripoll .El argumento es bastante truculento, a saber, un pastor bondadoso hasta el extremo es arrancado de su bucolica existencia cuando un hombre de bigote y barbita se intenta cepillar a su bienamada esposa. El caso es que el pobre pastor cree que ese hombre es el mismísimo rey de Spáña, por lo que no le queda otra que aceptarlo. No queriendo comulgar con ruedas de molino, y viendo que el rey tiene potestad para acostarse con ella, no decide otra cosa que matarla. El monólogo previo al apuñalamiento es impresionante, el actor, Joaquín Notario, un clásico del clásico español (perdón), hace que te quedas pegado a la butaca y lo único malo es que acto seguido llega el descanso, justo en el momento en el que estás esperando qué coño va a pasar a continuación. El caso es que el guirigai acaba, evidentemente, cuando el pastor se entera de que el listo que se quiere beneficiar a su santísima esposa no es el rey, sino un alto cargo cualquiera...y éso sí que no...Del rey abajo, ninguno se la endiña a mi cielo!. Se lo carga, y tan contentos todos...
Aquí se puede ver la suntuosidad de trajes y al enano

El lugar en el que se ponía en escena, el Hospital de San Juan, con el patio de butacas al aire libre, es un gustazo, como todos los espacios de Almagro, que es una lástima que se utilicen sólo durante el festival, cosa que en el fondo no me extraña porque fuera de esas fechas el pueblo supongo que pasará a convertirse en algo similar al lugar en el que vivían los chicos del maíz. (pero sin maizales siquiera...ni una puta sombra señores, ni una puta sombra...)

7 comentarios:

Anónimo dijo...

Si les gusta la ficción, un gran teatro y observar el mayor despliegue de medios en un acto de esta índole les recomiendo...
El debate del Estado de la Nación, un gran espectáculo con risas, burlas y grandes enfrentamientos actorales donde nuestros mejores monologuistas se enfrentan en dura lid ante un público de acólitos que no dudan en abuchear los comentarios del rival de su amo.
Sí señores, desgraciadamente la política no es más que eso TEATRO echar en cara a los demás que no han hecho lo que ellos no hicieron antes y prometer algo que saben de antemano que cuando tengan el poder no lo llevarán a termino.
Sinceramente creo que la clase política de este país ni siente ni padece, excepto cuando se habla de sus sueldos. Si bien es cierto que no se puede generalizar, lo de los políticos comprometidos con los electores es como lo de las meigas, "su modus operandi". Grandes declaraciones como "estoy en esto para forrarme" no desembocan en una dimisión y abandono de la vida pública; un presidente socialista hablando de la regresividad del sistema impositivo...
Si me quedo en el paro me parece que escribiré un libro sobre pifias y perlas varias de este grupo de variopintos personajes en la línea de la "Antología del diaparate".

Anónimo dijo...

Parece que alguien se levantó hoy con el pie izquierdo eh?

Anónimo dijo...

El comentario de Petrosky es la prueba concluyente de que la sociedad actual ha caído en un total desencanto hacia la política, hecho gravísimo si nos paramos a pensar las consecuencias que traerá. Ni la política es un teatro ni los políticos son actores (eso prefiero dejarlo para Calderón). No creo que haya tantos hombres que vayan sólo a por el dinero, máxime si tenemos en cuenta que muchos de ellos tendrían beneficios mayores con un trabajo más cercano a la carrera que estudiaron.

Aunque es bien cierto que el debate sobre el estado de la nación no estuvo exento de risas y burlas, no me parece correcto fijarse solamente en estos detalles. Al margen del debate con el Partido Popular, el PSOE guardó un gran respeto al resto de fuerzas políticas del Congreso, y viceversa. A mí me pareció muy interesante.

Anónimo dijo...

Hablando de izquierdos...

Diógenes de Babilonia dijo...

No es necesario ser de izquierdas para que a uno le hubiera gustado el debate sobre el estado de la nación. Evidentemente, los del PP estarán enfadados con todo lo que haga o deje de hacer el Gobierno; pero no así los de CiU o los del PNV, partidos que mostraron sus discrepancias desde el respeto y la moderación.

Anónimo dijo...

¡¡¡QUE SE JODA EL GOBIERNO!!!!!
JEJEJEJE ¡¡¡QUE SE JODA, QUE SE JODA EL GOBIERNO!!!!!!

Diógenes de Babilonia dijo...

Con lo que ha tenido que aguantar, este Gobierno ya es injodible.