miércoles, 19 de diciembre de 2007

Visita por la tarde, de Antonio Gamoneda


Joer, qué frío hace, el otoño se acaba en breve, y se nota...las Navidades acechan...regalillos mil. Ya podía nevar como hace un par de añitos...aunque por el Polígono ya lo ha hecho.

Entreé en la casa y me quité el abrigo
para que mis amigos no supieran
cuánto frío tenían, pero ellos
dijeron: "Ven, entra en la cocina".
Y la madre hizo fuego para mí.

No he podido tener nunca mi fiesta
en paz como aquel día:
el vino en la madera; la mirada
de los niños; las palabras;
el resplandor del fuego...

Cuando llegó la noche, la mujer
sacó las manos del agua
y separó los cabellos esparcidos
sobre el rostro cansado.
Y vi el rostro.
Rostro cansado: amor
Y sonreía.

3 comentarios:

Diancecht dijo...

Bueno, deja que la nieve se espere un par de días más, que hay que pasar el Padornelo con cadenas ...

Anónimo dijo...

ME PREGUNTO QUE CLASE DE PERSONAJILLO PUEDO IDEAR ESTE MANUAL.
Seguramente un militar, eso lo he deducido yo solo.
Pensamos todos en el mismo?????

Lo que mas me gustó es eso de terminar las primeras frases que le decimos con "su nombre, sin abusar de el, ya que cada 2 o 3 frases le da a la conversación un aire mas personal."

Me encanta. Es pura falsedad, artificialismo e hipocresía todo juntito.

Menudo personajillo.

Y respecto al tema de la nieve, me pasaré a hechar una meada, y ya te abro el tráfico en toda la A-52.

Anónimo dijo...

Si, ya se que me he equivocado de post.........