miércoles, 27 de febrero de 2008

FOTO

Atención¡¡¡¡ tengo testimonio gráfico:



Lo que no tengo es photoshop...:-(

martes, 26 de febrero de 2008

Series de la infancia...

En primer lugar, no pienso hablar del debate de ayer. Sólo decir que Rajoy es feo de cojones, que llevaba un peluco de dimensiones cósmicas y que su primera imagen a la cámara provocaba una mezcla de horror, lástima, vergüenza ajena y asquete. Su intento de hacerse con los votos de los "currantes" suena más falsa que su heterosexualidad (ya vemos lo que han subido el sueldo mínimo cuando estuvieron en el poder), y lo de que "no hable de macroeconomía ni de cosas que nadie entiende", es tratar a sus votantes de paletos sin estudios. Además, tiene ojos asustadizos, labios babeantes, prende al hablar, y debe de salivar más que una llama, porque si no no se entienden esos finales de palabras tan sibilantes. De lo de la niña neonata mejor no hablar, su patética actuación demuestra que hizo bien en dedicarse a la política y no a ser un titiritero, porque iba a vivir bastante malamente. O sea que, señor Rajoy, se jode usted y se levanta a las siete de la mañana.
Pero no quería hablar del debate. Cuando se llega a una cierta edad, uno acostumbra periódicamente a hablar de las series que uno devoraba en la infancia, a la par que el bocata de nocilla (o praliné), mientras manchaba de grasa las libretas cuadriculadas que, abiertas sobre la mesa, se interponían entre un servidor y la televisión. Pues bien, gracias a la interné, podemos retomar estas hermosas melodías que tan felices nos hacían cuando aún no pensabamos en el futuro, y si lo hacíamos, era para regresar a él.

MOFLY, EL ÚLTIMO KOALA
Una de las mejores series que recuerdo, despertaba el buen niño que llevaba dentro, me demostraba que bajo mi apariencia oscura y sarcástica (con diez años) existía un corazón sensible, amable y apacible...el koala no hablaba, pero era tan riquiño...lo que más recuerdo era una especie de presentador de televisión extraño, y la verdad, del argumento no me acuerdo de más que unos cazadores querían matar a Mofly (cabroneshijosdeputa), y unos niños lo ayudaban.



LA TÍA DE FRANKENSTEIN
Serie de culto para un servidor de ustedes, en ella podíamos observar las vicisitudes de una panda de freaks como el genio de las aguas (que le salían chorros de los dedos, y yo jugaba a lo mismo cuando me duchaba y me resbalaba el agua por las manos...sí, todavía no eran años de jugar a otras cosas en ese lugar), el genio del fuego, que aparecía en una chimenea de una fragua, la dama blanca, el vampiro raro...no tengo muchos más datos, pero la volví a ver hace un par de años y no perdía demasiado. Era una coproducción alemanoaustríacoespañolafrancesacheca, y entre los actores estaban Sancho Gracia y Mercedes Sanpietro...



LOS AURONES
ZAS, ZAS, ZAS, LANZA RAYOS!!!!!. Juas, una de las mejores series hechas en España, con una ambientación entre Gótica-Ewokiana y Electroduéndica...me acuerdo que de aquellas las galletas TostaRica venían con dibujos de ellos...lo de que el prota lanzase rayos y convirtiera a los malos en frutas era un puntazo...



OS HERCULOIDES
Me imagino lo drogado que tenía que estar el que inventó esta serie y el productor que lo aceptó...pura serie Z llevada al dibujo animado, en la que se nos contaban las aventuras de un grupo formado por una pareja cercana a la era hyborea (con hijo), que tenía como mascotas-ayudantes a un rinoceronte con capacidad de alargamiento de patas, un dragón verde, un mono negro enorme, y dos...¿gluglucitos? ¿budines blancos? ¿fantasmas?...entre todos intentaban por todos los medios violentos posibles acabar con las invasiones alienígenas que día sí y día también sacudían sus ¿tranquilas? vidas...



EL SUPERAGENTE 86
Ésta la echaban a la noche, la parodia creada por Mel Brooks de oo7, de la que ahora van a hacer un remake. Es escuchar la musiquilla y venírseme la sonrisa a la cara...era buenísimo el actor, todo un mortadelo de la pérfida albión. (o era americano?)


LOS MASTERS DEL UNIVERSO
Los dibujos más gayers de la historia de la televisión, con un He-Man ultra hormonado, que tiene como amigos a un tipo de bigotón, una especie de drag-queen, un tigre verde con máscara de BDSM y un extraño ser que levita llamado Orco...como decimos con Wham!, ¿cómo no nos dábamos cuenta...cómo?? Por el poder de Gayschool!!!!



Hasta aquí llega el repaso...no están todos los que son, pero son los que me ha salido de los mismísimos poner...acepto nuevas incorporaciones a este catálogo...

lunes, 25 de febrero de 2008

THAT'S INCREDIBLE¡¡¡¡


Antes de retirarse del mundo definitívamente, Barrett viajó por España durante dos años (1976 y 1977). Recorrió de manera anónima, frecuentemente en autoestop o en transportes colectivos, Andalucía, Extremadura y Galicia. Nadie le acompañaba y su equipaje era tan escaso como revelador: una mochila, una guitarra acústica y las obras completas de William Blake. En una de esas giras descubrió el que sería su refugio privado en el noroeste de la península ibérica, el monasterio de Oseira.

Enclavado en un cañón solitario del ayuntamiento de San Cristovo de Cea (Ourense), el Real Monasterio de Santa María de Oseira es el primer establecimiento en España (siglo XII) de la orden monástica del Císter, fundada en el año 1098 como una alternativa radical a la aristocrática orden de Cluny. Los cistercienses practican la amistad cristiana, cultivan la pobreza y la cultura mítica, y se establecen lejos del mundo, en lugares apartados de los caminos y las poblaciones.

Barrett, fascinado por el encanto agrestre del lugar, el silencioso devenir de la vida monástica y la hospitalidad de los monjes, se alojó en una de las celdas de invitados de Oseira durante cuatro meses de 1976 (entre septiembre y diciembre) y otros tres del año siguiente (de abril a junio). Solamente salía del monasterio para pasear por las sierras cercanas. Gustaba especialmente de dos lugares, Loma Chaira, una terraza herbosa de amplísima panorámica situada a casi 1.200 metros de altura, y el Penedo de Cuncas, un risco sombreado por una abundante masa de castaños.

Durante su estancia en Oseira, Barrett compuso y grabó numerosas canciones, que registraba en un cassette barato. Se sentaba en el atrio del monasterio, casi siempre a la hora de la siesta, y cantaba quédamente, acompañado por la guitarra, temeroso de molestar a los monjes. El sonido de las grabaciones es malo en términos técnicos, pero atractivo desde una óptica poética: la voz está tamizada por el viento y el gorjeo del agua de la fuente.

DIOS MÍO, ERA VERDAD¡¡¡¡¡

sábado, 16 de febrero de 2008

El 22 de Mayo...se acerca...

Ya se puede ver el trailer de la nueva de Indiana Jones...dios, la piel de gallina, la boca seca y el pulso acelerado...sólo espero que no se hayan pasado con los efectos digitales...

jueves, 14 de febrero de 2008

´39, de Queen

Después de varios años intentando deducir qué coño quería decir la letra de esta canción, descubro gracias a la wikipedia la VERDAD, y la sorpresa no es poca..yo siempre pensé que la cosa iba de la guerra mundial, de soldados que volvían a casa después de la dura lucha, pero no, resulta que va (atención) de unos astronautas que vuelven a la Tierra después de estar un año en el espacio, y ven que el tiempo en el planeta ha pasado mucho más rápido que para ellos (al estilo del Planeta de los Simios). Sus esposas, hijos y amigos han muerto y todo es una mierda...por supuesto, tanto la letra como la música son de Brian May, que por aquel entonces estaría acabando la carrera de astrofísica, y claro, pues no podría pensar en otras cosas...lo que no entiendo es por qué le mete ese ritmillo country al asunto...
La letra es la que sigue:

’in the year of thirty-nine’
Assembled here the volunteers
In the days when lands were few
Here the ship sailed out into the blue and sunny morn
The sweetest sight ever seen
And the night followed day
And the story tellers say
That the score brave souls inside
For many a lonely day
Sailed across the milky seas
Never looked back never feared never cried

Don’t you hear my call
Though you’re many years away
Don’t you hear me calling you
Write your letters in the sand
For the day I’ll take your hand
In the land that our grand-children knew

’in the year of thirty-nine’
Came a ship from the blue
The volunteers came home that day
And they bring good news
Of a world so newly born
Though their hearts so heavily weigh
For the earth is old and grey
Little darlin’ we’ll away
But my love this cannot be
Oh so many years have gone
Though I’m older than a year
Your mothers eyes from your eyes cry to me

Don’t you hear my call
Though you’re many years away
Don’t you hear me calling you
Write your letters in the sand
For the day I’ll take your hand
In the land that our grand-children knew

Don’t you hear my call
Though you’re many years away
Don’t you hear me calling you
All your letters in the sand
Cannot heal me like your hand
For my life still ahead pity me

Aquí dejo el vídeo de un directo, en el que podemos ver a Freddie después de robarle el atuendo a uno de los niños del circo de los muchachos del Padre Silva...


Viendo la traducción, creo que lo de la Segunda Guerra Mundial no era una buena idea, de todos modos...

En el año 39 aquí se reunieron los Voluntarios
En los días en lo que las tierras eran escasas
El barco partió hacia la azul y soleada mañana
La más dulce vista nunca contemplada

Y a la noche le siguió el día
Y los cuenta-historias dicen
Que las veinte heroicas almas que iban dentro
Por muchos y solitarios días navegaron a través de los lechosos
mares
Nunca mirando atrás, ni teniendo miedo, y nunca llorando

No oyes mi llamada aunque estés a muchos años de ditancia
No me oyes llamándote
Escribe tus cartas en la arena
Para el día en que tome tu mano
En la tierra que nuestros nietos conocieron

Los Voluntarios volvieron a casa ese día
Y trajeron buenas noticias acerca de un mundo recién nacido
Sin bien sus corazones enormemente pesados
Por la tierra que es vieja y gris, y una nueva casa lejana
Tantos años han pasado y sin embargo me siento sólo un año
más viejo
Los ojos de tu madre en tus ojos me lloran

No oyes mi llamada aunque estés a muchos años de distancia
No me oyes llamándote
Escribe tus cartas en la arena
Todas las cartas en la arena no me pueden curar como tu mano

Por mi vida
Sigo adelante
Pobre de mí

miércoles, 13 de febrero de 2008

"No es país para viejos", de los hermanos Cohen


Cuando acabé de ver esta peli, lo primero que pensé fue...¿cómo es posible que se le esté dando tanto bombo a la interpretación de Javier Bardem, cuando es prácticamente un calco de la de Arnold Swarzennegger en Terminator? Supongo que los críticos verán enooooormes diferencias, pero para mí, la única es el corte de pelo, ya que cambia el pelo cepillo por una especie de homenaje a los buenos tiempos del Fary. Hay un momento en el que coge el teléfono de su última víctima, y parece que se va a poner a imitar su voz, estilo T-1000. Que no digo que esté mal, oigan, para nada, si a mi Chuache me encanta, y Bardem está muy bien, pero vamos, que si se lleva él el Oscar, que se lo den a todos los carapalo que ha parido madre.
Por lo demás, y sin que sirva de precedente, diré que la peli está muy bien, o al menos, está bien. El ambiente texano y sudoroso está muy conseguido, y la tensión no para de aumentar en todo momento (bueno, miento, los últimos veinte minutos para bastante, pero aún así funciona bien hasta el final), los toques de humor cohenianos son muy graciosos (como ver a Woody Harrelson con las flores en la mano, a pie de la cama del prota), y hay sangre a cascoporro. Tiene toques de Fargo, en lo que es uno de los mejores personajes, el compañero joven de Tommy Lee Jones, un policía novato que no hace más que decir lugares comunes y obviedades en todo momento.
La mejor escena, la del dependiente (ése sí merecía un Oscar) con Javier Bardem, momento monedita de la suerte...buff, se ponen de corbata, porque sabes que el Bardem no tiene piedad, ni compasión, ni amabilidad, ni humanidad, ni un buen cirujano rinoplástico.

La embriogénesis según Aristóteles


Ayer empecé a leer el libro "Mutantes. De la variedad genética y el cuerpo humano", de Armand Marie Leroi, y me he encontrado, en las primeras páginas, con la teoría que sustentaba Aristóteles para explicar la génesis de un embrión. De bizarra que es, no me resisto a exponerla aquí...
Según el maestro de Alejandro, el embrión se creaba con la unión del líquido seminal con el fluído menstrual, que se coagulaba creando un líquido espeso que, según él, era muy parecido a cuando un higo se cuaja en la leche para fabricar queso...¿Y cómo explica las malformaciones, que es en definitiva de lo que trata el libro? Pues bien, una cantidad alta de semen haría que el feto desarrolle miembros de más, o con partes de su cuerpo desmesuradamente grandes. Si la cantidad de semen es más alta todavía (no precisa la cantidad justa), saldrían gemelos unidos (al estilo siamés), y ya si tenemos una cantidad de semen ingente y pantagruélica, obtendríamos gemelos separados y normales. En palabras suyas, viene a decir:

"cuando el agua de los ríos es arrastrada con cierto movimiento, si choca contra algo, entonces dos sistemas se originan a partir de uno, y los dos conservan el mismo movimiento: lo mismo ocurre con el embrión"

Me imagino a los griegos buscando la cantidad justita para que le saliera el chaval medianamente normal..

lunes, 11 de febrero de 2008

The Temple Bar

A pesar de lo que pueda parecer, el Temple Bar no es sólo un bar, sino la zona en la que están los principales pubs de Dublín, lo que lo convierte en la mayor atracción de la ciudad y el lugar en el que se recala diariamente después de largas horas de visita y pateo por las callejuelas irlandesas. Su nombre parece provenir del pub homónimo, aunque hay quien dice que es a causa de la prohibición de que entrasen por allí los judíos... La gente (ahora los judíos pueden entrar, creo)comienza a ir por allí a eso de las ocho de la tarde, y poco después comienzan, en algunos de ellos, los músicos a tocar. El hecho de que haya música en directo -y que no te cobren entrada por ello-, los convierte en lo mejor de la ciudad. Los monumentos están bien, sí, la cárcel de Kilmainham es muy emocionante y tal, pero lo mejor sin duda de Dublín es el ambiente que se respira en los pubs cuando los violines empiezan a sonar y te metes entre pecho y espalda cuatro pintas de Guinness. Lo malo es que cierran muy pronto, a las dos de la noche apagan la música y ya no puede entrar nadie, y a las dos y media lo cierran...y ya no hay más, o sea que cada uno pa su casita. Otro gran inconveniente es que no se puede fumar dentro, y no puedes llevarte la cerveza para afuera, con lo que beber y fumar a la vez se convierte en una tarea casi imposible, y lo malo es que con el café pasa lo mismo (bueno, puedes llevarte para la calle el café en una especie de vaso de cartón, pero no presta nada). El lugar más o menos ideal para ello, que encontramos el último día, fue una cafetería (en el Temple Bar), que tenía terraza con calefacción, por lo que podías tomar un café y fumar sin congelarte -porque en Dublín hace un frío de la Virgen). Bueno, vayamos uno por uno describiendo los pubs en los que estuvimos (y no, no estuvimos en el Octagon Bar , que es el que tienen los U2, más que nada porque no lo vimos)

THE TEMPLE BAR


El primero en el que nos metimos la primera noche, y la primera sensación completa de estar en un país extranhero...allí pude darme cuenta de que me daba reparo cantar a pleno pulmón las canciones que salían de la arradio...¿que por qué? pues porque allí todo el mundo pronuncia de puta madre (no te jode), y todos parecen saberse todas las canciones que ponen, con lo cual, eso de chapuerrear sonidos absurdos con lejanas resonancias inglesas haciendo ver que sabes la canción completa (aunque sólo sepas el estribillo), aquí no vale. De todos modos, en cuanto pusieron el "Sweet child of mine", allá quedaron las vergüenzas a un lado y comenzamos a cantar uniéndonos a la turba...me imagino a un inglés intentando cantar una españolada...inventando palabras con la misma sonoridad pero que no tuvieran nada que ver...supongo que será como pa echarse unas risas...En fin, que el bar muy bien, muy buena música, peña borrachísima, poco irlandés en el sentido de que no ponían música folk (ni en vivo ni en muerto), pero vamos, que muy bien.

THE PALACE BAR


Uno de los más vetustos de Dublín, según parece, en el piso de arriba pudimos escuchar un grupo de música tradicional que tocaban en plan informal, sentados alrededor de una mesa, con sus pintas, sus conversaciones entre canción y canción...muy bien, muy acogedor ambiente, bastante futbolero por lo que se apreciaba en las paredes, con revestimientos de madera, todo muy irlandés (como el forum, pero estanhero y con música de violines en vez de con bachata, vamos).





EL GOGARTY´S
El que más me gustó, tiene dos partes, una abajo, con pub típico y música grabada, y la parte de arriba, en la que tiene música en directo desde las 14:30 hasta las 2:30, nada menos...allí pudimos tararear canciones como "Molly Malone", auténtico himno popular dublinés, "Dirty Old Town" (que yo conocía de mis tiempos de oidor de música celta, que de todo se aprende), o versiones de Pink Floyd ("Wish you were here", por ejemplo). lo mejor fue cuando la peña se puso a bailar en plan Lord of the dance, juas, muy folklorico pero daba la risa, con sus manos atrás y moviendo los pies como endemoniados. Era como estar en Hobbiton, pero con peña más alta (porque los irlandeses son una raza alta, me hicieron sentir pequeño y moreno como Alfredo Landa, tienen esa capacidad de minimizarnos).


Aquí, en el Gogarty´s, vi algo que en mi vida había visto, si descontamos un episodio de IT Crowd donde sale algo así. Fui al baño a hacer pis. Entro y veo que un hombre de color alternativo (alternativo al común, no quiero decir que fuera alternando como un camaleón), vestido con un atuendo elegante, me mira sonriendo. Está parado y espectante. Nervioso, me dirijo a un urinario y hago lo que nadie puede hacer por mí. Nunca acostumbro a lavarme las manos después de este acto, más que anda porque tengo mis partes limpias y de pequeñito ya me enseñaron a no mearme en las manos, pero no sé muy bien por qué, en ese momento lo hice. Y cual fue mi sorpresa que el hombre éste me echó jabón en las manos, con una sonrisa de oreja a oreja, a la vez que accionó el grifo (que era de sensores, con lo cual la acción se convirtió en un absurdo) para que yo pudiese hacer mis abluciones con total comodidad. Lo hice, con una mezcla de estupor y sentimiento como de colonizador decimonónico (a lo Cecil Rhodes), para observar cómo al terminar, el buen hombre me secó las manos con una papelote. Yo no me lo podía creer, pero en mi cretinismo congénito me limité a decirle cosas como "Ooooooh, thank you very much!!!!" o "OOooooooooh, that´s incredible, man!!". Allí me fuí, más ancho que largo, y cuando se lo conté a mis -menos paletos que yo- amigos, me dijeron: "Le darías algo, no?" y yo "No, por qué?"...bueno, el caso es que me di cuenta en ese momento de que el hombre trabajaba por las propinas, y supongo que tendrá un sueldo irrisorio. De todos modos, su trabajo es de los más absurdos (por no decir denigrantes, evidentemente) que he podido ver en mi vida, si exceptuamos a los cargos que se inventa la diputación del señor Baltar para dar cabida a los hijos trencos de sus amistades. El caso, que la siguiente vez que fui a desbeber pues ya le di algo al hombre inquietante del baño. Pero claro, cada vez que se iba al baño, un eurazo, y teniendo en cuenta la cantidad de cerveza que se bebe, pues echa cuentas...

jueves, 7 de febrero de 2008

Llegada a Dublín



Bueno, bueno, pues una vez recuperado del viajecillo, llega el momento de sentarse un poco a recapitular lo vivido, que es la tercera parte de un buen viaje, después de la precisa recogida de información de a dónde se va y del viaje en sí mismo (posiblemente la parte más importante, aunque en ocasiones, como con Los caballeros de la mesa cuadrada, te ríes más recordando las cosas que viviéndolas en el momento). Pues bien, tras la pantagruélica paella ofrecida por Lancelote (gracias de nuevo), dirigimos nuestros pasos a la T.1, que es de donde nos salía el avioneto. La compañía era Ryanair, así de modernos somos, y tras facturar, nos encaminamos a la zona de seguridad. Fuera cinturones y demás artilugios metálicos, y pa dentro. Allí nos despedimos de Lancelote, que quedaba en tierra con una cara mezcla de "qué lástima que se vayan mis amigos" y "joer, a ver si se piran ya, que quiero ir a jugar al Call of Duty 4". Antes de meternos en el avión nos fumamos nuestros últimos pitillos en tierra española en uno de esos cuartuchos transparentes en los que la gente sólo va a éso, a fumar, pero se ha acabado éso de charlar amigablemente en un ambiente pseudoagradable, no. Aquello son como cabinas de drogodependientes, en los que todo el mundo tiene cara de amargura, pensando en qué coño habrá pasado para que lo que hasta hace algunos años era sexy y cosmopolita ahora sea sucio, como de gente sin hogar, con pinta de ser los próximos candidatos a un cáncer de pulmón. Después de este gran momento, montamos al avión, una cosa cutre y como viejuna, con pinta de tener más años que el Memphis Belle, pero bueno, qué más da, es Ryanair, y por lo tanto, moderno y como de gente chachi que se sabe mover en la Interné. Despegamos, y ya se me pusieron de corbata. No sé desde cuando tengo tanto miedo a las alturas, pero siempre digo lo mismo, que no es vértigo, sino miedo, puro acojone, pánico primigenio, horror al vacío que se abre ante mis pies. Quizá no sea la altura misma lo que temo, sino que mi vida esté a merced de un aparato eléctrico, de que el último que lo ha revisado no estuviese borracho o simplemente despistado, o que el controlador aéreo se duerma...demasiados factores que hacen que desde que me subo al avión hasta que bajo mi única imagen mental sea la escena del accidente de "Viven!". De todos modos, mi temor pasó a ser pavor en el momento del aterrizaje, el avión iba dando unos bandazos que pa qué, parecía que estaba bajando una escalera a golpes, la gente gritaba "!EEEEOOOOOO!" a cada poco, yo me estaba muriendo, con el libro metido en los ojos para no ver nada, para que no me viesen la cara de pánico, de nenaza, de acojone. Por fin tomó tierra, respiré, me sequé el sudor, observé que continuaba vivo y escuché cómo unas trompetillas y unos aplausos grabados salían de los altavoces. Todo muy moderno y juvenil. Ryanair. Jodidos cabrones. Menudo momento me hicieron pasar.
Una vez aterrizados en irlanda, nos bajamos por las escalerillas estilo Papa (en Ryanair no te ponen pasillito como en las otras), y nos dirigimos a la salida del aeropuerto. Allí pedimos un taxi, dirección Kildare Hotel, en la calle Kildare. El taxista miró una y mil veces el papelito que le brindábamos (más que nada porque no sabíamos pronuncias bien, si Kildar o Keildar o Kaildar o Kaildair), y por fin pareció arrancar...todo iba bien hasta que el interfecto comenzó a pronunciar un galimatías que no había dios que lo entendiese, por lo que decidimos asentir a cada poco y decir "yeah", para que el buen hombre creyese que entendíamos algo. Yo dedicaba mis esfuerzos a pillarle por el tono si nos estaba haciendo una pregunta, para contestarle algo (no sé muy bien lo qué), pero no lo conseguí...no entendía ni papa, y lo que es más, no parecía que mi compañero, al que he visto debatir en ese idioma temas elevados a altas horas de la madrugada con extranjeros, entendiera mucho más que yo. Se ve que cuando uno está sobrio el inglés cuesta mucho más...de ahí quizá venga la gran afición de los irlandeses por la bebida.
Las casas que estaban de camino desde el aeropuerto hasta el Hotel ya dan una idea de lo que uno se va a encontrar en la ciudad: típicas casas victorianas, de ladrillo visto, estilo inglés...la ciudad en su mayoría me ha recordado a la imagen que yo podía tener (porque nunca he estado) de Londres, en el sentido de esas manzanas de casitas bajas, con verja todas ellas, y una entrada por la parte de abajo del portal (era la entrada del servicio, el momento en el que se crearon). Lo particular de Dublín es que ese estilo un tanto sobrio es transformado en algo mucho más alegre por el hecho de que todas las puertas están pintadas de vivos colores, como azules, amarillos, verdes, o rojos (en plan portugués, pero circunscribiéndose sólo a la entrada de la casa).
El hotel Kildare es muy recomendable, aunque de precio algo caro: 55 euros por persona en un habitación doble. Está situado en plena zona Georgiana (a mi entender, una especie de Neoclásico Inglés) y por lo tanto, al lado de los museos más interesantes, el Trinity College, y las calles más bonitas de toda la ciudad. Las habitaciones son grandes y bastante bien amuebladas, y el papel de las paredes puede resultar un tanto hortera, pero como estás en Irlanda y todo es así como novedoso, pues no te lo tomas a mal.


Nos vinieron a recoger Chiyo-Chan y Diancecht, ya embolingados a las once de la noche, y no es raro, porque a esas horas, un sábado, todo dios está borracho, tíos y tías, lo que es normal teniendo en cuenta que comienzan a salir a las ocho de la tarde. Después de los abrazos y muestras de afecto pertinentes, salimos hacia la primera parada de nuestra ruta: EL TEMPLE BAR.

sábado, 2 de febrero de 2008

Noche en Malasaña


Bueno, bueno, pues aquí estamos zapateados en casa de Lancelote, a punto de pillar el avión para Dublín y un tanto cansados por la salida nocturna por Malasaña, que mucha fama y mucha vaina, pero los bares cierran prácticamente a las tres y media (y hay tanta policía por las calles que no hay uno que se atreva a saltarse los horarios),y los que abren un poco más tienen unas colas de la virgen. La verdad es que pensándolo bien hay que ser cenutrio para esperar, por ejemplo, media hora o cuarenta minutos a la intemperie para entrar en un bar. Porque los que tienen colas en ese barrio no se piensen que son Macrodiscotecas o Salas de fiestas estilo Daiamont(e). No. Son bares, simples bares en los que ponen música más o menos decente (pero nada especial, no se crean), copas a ocho euros y cervezas a cuatro, masificados y a los que aún por encima, pues éso, has de esperar como para la consulta de la Seguridad Social. Al final acabamos abandonando esa mítica zona (supongo que sería mítica en sus tiempos, y estará un poco de capa caída), para dirigir nuestros pasos a la zona de Gran Vía, en donde nos metimos en el según parece local propiedad de Alaska, el Morocco. Diez eurazos de entrada, mas un euro y medio por el ropero. El ambiente, pues como de revival ochentero total, con algunas versiones destacables de clásicos españoles...Cuando salimos de allí, con los bolsillos vacíos y la cabeza cargada, nos metimos en el metro y rumbo a Coslada. Después de casi una hora de viaje, nos pudimos meter en cama no sin antes dar cuenta de la nevera (muy bien surtida) de Lancelote -que por cierto, hoy nos ha hecho una paella de las que solo parecen saber hacer las madres-.
Por cierto, la primera etapa del viaje transcurrió sin incidentes, con parada en Mota del Marqués, en el mítico Ruy-Wamba (no se confundan, es un simple bar), y cogida al revés de la M-40, con lo cual tuvimos que dar la vuelta a todo Madrid...después nos enteramos de que había algunos lugares en los que se podía cambiar el sentido..
Bueno, bueno, pues allá vamos...Baile Àtha Cliath!

viernes, 1 de febrero de 2008

Rumbo a Dublín!!


Pues ya llegó el día de la partida a la verde Irlanda, tierra que jamás en mi vida pensé en pisar y que por azares del destino aparece como mi primer viaje al extranjero (sin contar Portugal, que es extranjero pero poco, porque más o menos me entiendo entre los indígenas) después de más o menos cinco años. Salimos mañana para Madrid a las cuatro de la tarde en el coche de Sir Robin, y una vez allí nos espera Lancelote (de Rodríguez) que haciendo gala de su hospitalidad nos alojará en su mansión. En la capital nos juntaremos con Diancecht, que tuvo mejor suerte o más conocimientos (científicos) con el vuelo, por lo que podrá disfrutar de cuatro dublinesas horas más...El avión sale el sábado a las ocho de la tarde, llegando a Dublín a las nueve y media (tarda dos horas y media, pero allí es una hora menos). Allí supongo que tendremos que buscarnos la vida Sir robin y yo para llegar la Malborought Hostel (que según los comentarios de internet, es mejor dormir en la calle que en ese lugar) en donde si todo va bien estarán Chiyo-Chan y Diancecht con una pinta de Guiness bien calentita para recibirnos. Después, lo que den de si dos días y medio en esa ciudad que a priori no parece tener mucho que ver si exceptuamos el Trinity College (con el libro de Kells, jarl!),la fábrica de Guiness, la casa de Oscar Wilde, el bar de Bono y la cárcel de En el nombre del padre, pero bueno, gracias a LA GUIA AMIGA, seguro que algo más se descubrirá.
Felices carnavales a todos!!!